21.03.2013 16:50:00
El Presidente del Consejo de la Magistratura porteño, Juan Manuel Olmos, participó de la audiencia que el Papa ofreció a un grupo de argentinos.
Ayer a la tarde el Papa Francisco, recibió al primer grupo de argentinos (luego de la audiencia que tuvo la Presidenta CFK el lunes), en la residencia de Santa Marta, donde está desarrollando transitoriamente sus actividades el Santo Padre, mientras acondicionan sus dependencias oficiales.
El grupo estuvo encabezado por el Presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, Monseñor Arancedo, y por el grupo del clero argentino que estuvo en Roma para presenciar la misa que dio inició al nuevo papado. También participaron familiares del ex arzobispo de buenos aires, un grupo de funcionarios de la Cancillería encabezados por el Secretario de Culto, Guillermo Oliveri y el embajador ante la Santa Sede, Juan Pablo Cafiero y Sra., y por la Ciudad de Buenos Aires, fueron invitados Olmos y la Diputada porteña Victoria Morales Gorleri, Presidenta de la Comisión de Educación de la Legislatura.
La historia personal de Olmos con Jorge Bergoglio, empieza con su nacimiento, ya que fue el por entonces cura quien lo bautizara en el Colegio Máximo de San Miguel, hace 40 años.
En realidad, Bergoglio ofició de párroco familiar (caso a sus padres, y bautizó a él y a sus hijos) a partir de la amistad que lo une desde el año 1966 con la Tía de Olmos, la decana de la Facultad de Filosofía de la Universidad del Salvador y funcionaria de Cancillería, Ana Zagari.
Cuando estaba terminando el encuentro y luego de que desde la casa pontificia dispusieran las fotos grupales del encuentro, el Papa Francisco, hizo notar esa antigua relación, y rompiendo nuevamente del protocolo, exclamó: " Falta la foto con el gordo" y dispuso el retrato con el Presidente del Consejo de la Magistratura.
"Yo a este lo tuve en brazos", recordó para sorpresa de los presentes y mientras disparaban los flashes de los fotógrafos del Vaticano, entre risas el Santo padre aclaró "pero cuando lo bauticé, ahora sería un milagro", lo que despertó las carcajadas generales.
Ayer a la tarde el Papa Francisco, recibió al primer grupo de argentinos (luego de la audiencia que tuvo la Presidenta CFK el lunes), en la residencia de Santa Marta, donde está desarrollando transitoriamente sus actividades el Santo Padre, mientras acondicionan sus dependencias oficiales.
El grupo estuvo encabezado por el Presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, Monseñor Arancedo, y por el grupo del clero argentino que estuvo en Roma para presenciar la misa que dio inició al nuevo papado. También participaron familiares del ex arzobispo de buenos aires, un grupo de funcionarios de la Cancillería encabezados por el Secretario de Culto, Guillermo Oliveri y el embajador ante la Santa Sede, Juan Pablo Cafiero y Sra., y por la Ciudad de Buenos Aires, fueron invitados Olmos y la Diputada porteña Victoria Morales Gorleri, Presidenta de la Comisión de Educación de la Legislatura.
La historia personal de Olmos con Jorge Bergoglio, empieza con su nacimiento, ya que fue el por entonces cura quien lo bautizara en el Colegio Máximo de San Miguel, hace 40 años.
En realidad, Bergoglio ofició de párroco familiar (caso a sus padres, y bautizó a él y a sus hijos) a partir de la amistad que lo une desde el año 1966 con la Tía de Olmos, la decana de la Facultad de Filosofía de la Universidad del Salvador y funcionaria de Cancillería, Ana Zagari.
Cuando estaba terminando el encuentro y luego de que desde la casa pontificia dispusieran las fotos grupales del encuentro, el Papa Francisco, hizo notar esa antigua relación, y rompiendo nuevamente del protocolo, exclamó: " Falta la foto con el gordo" y dispuso el retrato con el Presidente del Consejo de la Magistratura.
"Yo a este lo tuve en brazos", recordó para sorpresa de los presentes y mientras disparaban los flashes de los fotógrafos del Vaticano, entre risas el Santo padre aclaró "pero cuando lo bauticé, ahora sería un milagro", lo que despertó las carcajadas generales.
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